El Viernes Santo nos tocaba madrugar, salir en procesión por la autopista, rumbo norte. Habíamos quedado a las 09.30 A.M. en las magníficas instalaciones deportivas donde se celebraría el XXXIII torneo para Veteranos de Calella.
A mi llegada tan sólo Safa, Tari, Isabel y la Remei habían llegado, junto a mí hicieron acto de aparición Raimon y Maria Jose. El resto de componentes iría llegando sobre la marcha, algunos se lo tomaron con calma. Antes de salir había arreglado las gallinas, las palomas, los perros, las ovejas y la cabra.
Dos grupos de 3 equipos masculinos y un grupo de 4 equipos a nivel femenino se pasarían la mañana del día festivo jugando a balonmano, realizando una parada para la butifarrada que el club organizador había preparado.
Oar de Gràcia, CAT-45 y Sant Fost eran los miembros de nuestro grupo. Mientas que el otro grupo lo formaban "Pare Manel", Berga, y Calella.
Empezamos bien. Jugamos contra un Oar que parecía reforzado por grandes jugadores que creo habían sudado la camiseta del Castellar o Arrahona. De hecho presentaban un equipo muy competitivo, bastante bien conjuntado donde tenían gente para cada una de las posiciones, hay que tener en cuenta que algunos de los jugadores más característicos del equipo de Sabadell juegan también en el CAT-45.
La falta del míster hizo que nosotros mismos gestionásemos los escasos cambios de que disponíamos. Teníamos demasiadas ausencias, era lógico, días festivos que algunos aprovechan para viajar o para medicarse con un traslado momentáneo a Setcases por prescripción média, mientras que Micky participaba en un emotivo encuentro en el Sur de Francia, para homenajear a las víctimas por el aniversario del triste accidente de aviación de German-wings.
Debemos enfatizar la presencia de nuestras incondicionales, las compañeras que siempre vienen a los partidos, es gracias a Toni, a Montse, a Tari y Safa, a Raimon, a Lluis y a Luis mi, que nos ayudan a llenar las gradas, con esas compañeras que sufren de nuestro balonmano, ya sé que Roman a veces trae a Cristian, y Enric a veces al "periquitu". Sin vosotras no podríamos jugar a Balonmano.
Los presentes eran Lluis y Toni en la portería, Barri, Montse, Enric y Raimon en los extremos, Safa y Alfons de pivotes, Luis mi, Román y Tari en los laterales y Juanito en el centro.
Estaba claro, jugaríamos en ataque en un 3-3 (o ataque clásico), realizando variaciones a 2-4, para jugar con dos pivotes como variante ofensiva, mientras que en defensa optaríamos por la defensa 6-0, igual que si lo hubiese planteado el míster.
El partido empezó bien. Realizamos buenas acciones defensivas, con lo que Lluis remataba la faena, dejando su portería inédita durante bastantes minutos. Sacó manos prodigiosas y cuando el balón iba muy abajo sacaba los pies.
Los partidos pactados a una sola parte de 25 minutos, seguían las normas clásicas. Nuestro handicap lo teníamos con los árbitros. Viejos conocidos que en ocasiones sancionan lo que creen que ha sido y no lo que han visto. Nuestro capitán estuvo mu hábil, al conseguir saque (no me refiero a la bebida japonesa) en ambos encuentros, llegando a engañar al contrario, "¿Saque o Campo?, pues nosotros sacamos".
Del estamento arbitral, en general los aspectos más generales, el que mejor estuvo fue Jaime, que insistía en dar protagonismo al juego, al parecer algunos jugadores no lo entendieron, sobretodo los del OAR en su enfrentamiento con el CAT-45, olvidando momentaneamente que se trataba de un amistoso, mientras que Ramón fue quien más nos perjudicó, aunque tampoco para decir que lo hizo fatal, simplemente que le faltó un poco de objetividad.
En ataque estábamos inspirados, luis mi soltaba el brazo, mientras que el resto también estaban iluminados a la hora de lanzar, todos menos un servidor, que no supo sacar partido de los numerosos y perfectos bloqueos que realizaron mis compañeros, dejándome en situación franca para marcar, pero negado cara a gol.
La historia del OAR terminó pronto. 6-15 fue el resultado final. Con un Safa brillante, un Luis mi resolutivo, un Román fuerte, un Montse metido, un Enric atlético, un Barri recuperado, un Raimon organizador, un Tari sobresaliente (Isabel me recordó que metió tres goles), un Alfons colosal, un Juanito fallón, y por tanto, un Lluis impecable. Toni descansó ese primer partido.
Nuestro segundo partido nos enfrentó al CAT-45. Para este partido Safa cambió de camiseta. Se allistó en las filas azules para seguir preparando el europeo de Croacia. Antes de narrar el partido he de decir que nos faltó un poco de mano izquierda. Nos faltó dialogar. Nos faltó saber que si el CAT-45 estaba tan interesado en los preparativos, nos deberian haber dicho que querían jugar la final Sí o Sí. Dicen que "a toro pasado todo el mundo invertiría en Bolsa"...... . Nosotros nos lo tomamos profesionalmente y les quisimos poner las cosas difíciles, vamos porque también queríamos jugar la final. Así que empezamos jugando muy bien. Raimon y Alfons intercalaban la posición de pivote, mientras que el resto ocupaban su posición natural. Toni bajo palos estuvo francamente bien. a tener en cuenta que uno de nuestros activos más fiables jugaba contra nosotros, y pese a ser el mejor de su equipo, se encontró con la robustez y dureza de Alfons & and CO. que le impidieron brillar como siempre suele hacer.
Durante todo el partido fuimos por delante, no teníamos claras ventajas, pero sí con la tranquilidad que produce mandar en el marcador, hasta los minutos finales donde CAT-45 reaccionó, llegando a empatar e incluso casi ganar, tras error arbitral por no sancionar una clara falta sobre Barri, al culminar contragolpe al que le faltó 1 segundo de tiempo real. Empate a 9 lucía el luminoso. Para saber quién sería el vencedor del grupo, tendríamos que esperar al desenlace del CAT-45-OAR.
Ese partido se convirtió en fraticida. OAR, crecido, aguantó durante los primeros compases, luego la superioridad del CAT fue aplastante pero no se transformaba en goles. Joan, guardameta del CAT (defendía la portería sabadellenca), realizó paradas sensacionales a Alberto, a Safa, a Gomis, a Victor, a Carles, todos probaron su medicina, sufrieron de su dedicación y maldijeron su observación. Mientras que los bravos jugadores del OAR lo protestaban todo, desluciendo el buen hacer de Jaime, que al final se vió obligado a excluir a uno de los jugadores de OAR por reitaradas protestas, con razón o no, y como dice nuestro míster, Jordi Nogueras, "acatamos la decisión arbitral, ya sabéis, unas veces nos favorecen, otras nos perjudican y a veces aciertan".
La victoria del CAT no fue lo suficientemente amplia como para jugar la final. En este momento es en el que me quejo de que: con diálogo se podía haber solucionado el aparente y lógico malestar de los miembros del CAT.
Tras la butifarrada, algunos de nuestros mejores activos se fueron, por lo tanto, para la final estábamos muy mermados, otro motivo por el cual se podría haber llegado a un acuerdo, estoy seguro que el club organizador hubiese permitido que ambos equipos jugásemos una parte contra el potente Calella.
El otro grupo, vivió momentos extraños, Berga ganó a Pare Manel, Calella a Berga, y todo dependía del último partido que estuvo muy ajustado, al final, los organizadores jugarían la final contra Sant Fost.
El partido fue igualado mientras nuestras fuerzas aguantaron. La final era a dos partes de 20 minutos.
Al descanso mandábamos de 1 en el luminoso, al final creo que perdimos de 5 ante un equipo con más efectivos y muy bien conjuntado. A destacar la lesión de Enric (el ansias) en los últimos minutos, o es la excusa para librar este fin de semana.
Además, este año había torneo femenino, creo que lo ganaron las chicas del OAR o las de La Roca (no lo recuerdo), quizás por la belleza y figuras femeninas de todas las participantes. Parecían top models desfilando por pasarelas, con un balonmano moderno, estético y con muy buenas acciones, al parecer eso me despistó, por eso, creo que con el balonmano que hicieron, ganamos todos/as.
Fue un lujo ver a tantas caras conocidas (Bego, Naty, Conxi, Montse, Inés,....., a cual más guapa) este tipo de encuentros hace que este deporte sea todavía más atractivo.
Al final quedamos en segundo lugar. Sabemos que estamos en deuda con los miembros del CAT, a ver cómo reparamos el malentendido.
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