Controles de alcoholemia en la noche en que el equipo Máster del Sant Fost venció a los veteranos OAR de Gràcia

Empezaré por el final. El resultado fue 25-15 a favor del equipo local. Sant Fost. El partido se disputó un viernes por la noche, justo a la hora del entrenamiento. La cita era a las 22.00 horas, asuntos laborales me hicieron llegar cuando se llevaban disputados 4 minutos de partido, el marcador mostraba 0-1, y justo en el momento de pasar por delante de la parroquia visitante (muy nutrida por cierto, con muchas caras conocidas) Montse realizó uno de esos tirines desde su posición natural que no subió al marcador, entre otras cosas porque el balón no entró, es más, la dirección era la correcta y podría haber sido un gran gol si el guardameta visitante no estuviera en la trayectoria, de hecho, en los primeros tres o cuatro lanzamientos de nuestro bravo extremo el resultado fue el mismo, balonazo al portero; ¿Quién le mandaría ponerse justo en el medio?. Después del partido teníamos cena, y el miedo a los controles previstos por los cuerpos de policía hizo que nos moderásemos en la bebida, de hecho, siempre deberíamos hacerlo así, pero seguramente en estos casos todos extremamos la ingesta de alcohol, el objetivo sigue siendo mantener la magia de estas cenas semanales.
Alberto y Manolo tenían sendos compromisos que les impidió venir, mientras Alex (el portero) continúa su calvario en la recuperación, el resto se presentó al partido, y casi todos a la cena, a la que se sumarían algunos jugadores y miembros del OAR.

La primera mitad del encuentro la empezamos con Lluis en la portería, se mostró dispar, eso es algo parecido a lo de con nubes y claros, rayos y truenos, ángeles y demonios, yin y el yang, o el Gin y el tónic, que alternaba acciones de mérito, incluyendo paradas de dignas de mención, con acciones de mala suerte que le llevaron a recoger el balón del fondo de las redes hasta en 8 ocasiones, si bien, parte de la culpa del poder anotador del equipo visitante fue la falta de tensión defensiva del resto de compañeros, aunque tampoco quiero desmerecer las acciones ofensivas visitantes. De hecho, fueron ellos los que lideraron el marcador hasta el minuto 24 aproximadamente, como no tenemos la tecnología del Sant Martí, no podemos datar con exactitud los minutos en los que mandaban en el luminoso. Eran capaces de trenzar jugadas, penetrar, lanzar desde posiciones difíciles ajustando mucho el balón para conseguir añadir goles a su cuenta, llegando a mostrar una renta máxima de 4 goles cuando el marcador mostraba un demoledor 3-7; durante la liguilla, ya les había ocurrido en otras ocasiones, liderar el marcador con un juego solvente y combinativo pero a medida que las fuerzas se diluyen, y sobretodo al no tener más elementos de refresco, les penaliza en exceso. El colegiado, famosillo de la televisión, que visitó a Carlos Sobera para ver si ........... (como no vi el programa de citas, no puedo opinar) ....., impartió justicia, la tarea era fácil, ambos conjuntos quieren jugar a balonmano, quieren divertirse practicando este deporte y son conscientes que el lunes hay que volver a trabajar, por consiguiente, le resultó relativamente fácil arbitrar, pero supo estar en su sitio, cuando por falta de frescura física, los miembros del OAR, empezaron a ser excluidos, durante unos segundos quedaron 3 jugadores de campo más el portero. Esta situación anómala no se debía a errores arbitrales, ni a juego sucio por parte del equipo de Sabadell, era fruto del cansancio, llegar tarde, o la frustración de ver como en pocos minutos esa renta de cuatro, tres, dos goles desaparecía para terminar por debajo al término de los primeros treinta minutos, en los que en el aspecto ofensivo, por parte del equipo local la había dirigido primero Micky en el centro y después Iván, con Montse y Eugeni en los extremos, Román y Francesc en los laterales, Lluis en la portería y Josep Antoni Tarifa Bibiloni (Tari para los amigos, Altari para .....) en el pivote. Alfons era el recambio defensivo de los centrales, Raimon relevó a Montse en el extremo y Enric, como hombre libre, tenía carta blanca para hacer lo que quisiera, incluiremos en este apartado "poliza de seguros para finalizar bien un contragolpe", pero Jordi Nogueras, sabedor de la valía del jugador, le dejó libertad de acción para deleite de la grada. Además, el míster, dosificó los cambios con el objetivo de repartir minutos a los jugadores que han tenido menos oportunidades de juego, y dar descanso a piezas importantes como Isidro Safont, Safa. Un inquietante 9-8 lucía un marcador que se había movido muy poco al principio, y no fue hasta el momento de las exclusiones en que se revolucionó un poco, pasando a ser mandado por Sant Fost, liderato que no abandonaría hasta el final. En cuanto a las exclusiones no hay nada que objetar, fueron claras, no ofrecieron dudas, si a caso, faltó alguna más. Micky besó la lona en varias ocasiones, a Álex le hicieron un redoble de tambor que terminó en pasos, a Francesc le calentaron sistemáticamente y Román recibió hasta en defensa, eso mostraba la dureza y rocosidad del equipo visitante, que mientras aguantó físicamente, no dio un balón por perdido, sin embargo, cuando las fuerzas mermaron, dejaron de bajar favoreciendo los contragolpes, casi siempre letales, del Sant Fost, ante los que el portero nada podía hacer.
La segunda mitad sirvió para que Juanito entrase en juego, le relevaba Alfons en tareas defensivas, de manera que con otro enfoque táctico y un rival fatigado, fue relativamente sencillo escaparse en el marcador, además, Toni, empezó muy metido en el partido, sacando balones increíbles, para acto seguido lanzar misiles en forma de contraataque. Algunos de esos lanzamientos, en forma de melones, pudieron lesionar a más de uno, pero también era una manera de estar activos, la temperatura ambiental había bajado, y el público que animaba mucho al principio, pareció decaer como el juego del OAR, equipo que tendrá que recurrir al mercado de invierno para introducir nuevos fichajes que oxigenen su plantilla, con un fondo de armario más poblado estaríamos hablando de otro resultado mucho más ajustado. Esta vez fue gracias a Montse que Sant Fost sacase una buena renta al principio de la segunda mitad. Si bien al principio Montse las veía cuadradas, no metía gol ni al arcoiris, en la segunda mitad protagonizó un cambio radical, se convirtió en Midas, todo lo que tocaba terminaba en gol, finalizando acciones increíbles, o conectando con Román cuando pasaba a circular por dentro. Eugeni quiso probar la empanada, empezó por la gallega, como se hizo un lío, cató la argentina, que se parecía a una "tres con", pero se lo pensó dos veces y al final salió, y como siempre, Safa la finalizó en gol. El míster nos pedía seriedad, teníamos que seguir jugando, sacando a los pivotes, haciendo circular a los extremos, realizando cruces, incluso Luis mi entró en el esquema ofensivo, para acercarlo más al nivel que se le presupone y que todos sabemos que atesora. Al final fueron diez goles de diferencia, demasiados para el esfuerzo realizado por los jugadores del OAR, que una vez más vieron como habían conseguido una sólida diferencia de goles que se esfumó en poco tiempo quedando sin reacción.

Trabajo fácil para el colegiado, dejó seguir el juego y supo cortar de raíz las reacciones discordantes que aparecieron cuando las fuerzas empezaban a escasear. Seguir los contraataques le llevó a sudar un poco más de lo que algunos piensan que se suda en un partido de veteranos.

El público de la grada animó y vitoreó las acciones demérito, de uno y otro equipo, sobretodo las del equipo visitante, o quizás era la estrategia para no pasar frío. Disfrutó, lástima que luego sólo Ricard viniese a la cena, mientras que la parroquia local, a escepción de unas pocas personas, debió pensar que era mejor resguardarse en casa.

Jordi Nogueras suele dar charlas de acorde con las dificultades que le presupone al rival. Ante un archiconocido equipo quiso dar descanso a las vacas sagradas y hacer jugar a los pupilos que viernes tras viernes sudan la gota gorda intentando pasar un buen rato. Lo consiguió, aunque durante un buen rato se mostró cauto por el resultado del marcador, aunque era consciente que ganaríamos el partido.

Iván le dio descanso a Micky durante la segunda mitad de los primeros treinta minutos. Metió dos goles y buscó la "Safa-Conection". Se mantiene en forma, será fundamental para los partidos de la segunda vuelta.

Montse empezó dando paladas de cal, reservó la arena para la segunda mitad, dicho de otra manera, casi mata al portero en los primeros lanzamientos, supongo que éste se cansó de los chepazos del Montse, y dejó que se convirtiera en "Montserrakis Tibetanus de la sierra", que tras la meditación del descanso, convirtió en gol todo lo que tocó, hasta los imposibles y cerrados lanzamientos del extremo contrario, que al tocarlo, sancionaban la acción con penalti. Marcó 5 goles, todos ellos en la segunda mitad, además merece ser mencionada la "Ukranianian-connection", con un pase letal y magistral para Román que transformó a pivote en uno de los momentos de inferioridad.

Safa, pese a ver casi todo el partido desde el banquillo, marcó 5 goles. Recogió lo que Tarifa había sembrado, dicho de otra manera, pilló a la defensa cansada, y en un terreno así, "Sidret" se convierte en el Tigre de Martorellas que juega en el Sant Fost, capaz de todo, hasta de salir contragolpeando. Rozó la perfección.

Micky salió desde el principio en las acciones ofensivas, era el encargado de orquestar al equipo, marcar el inicio de las acciones intentando buscar la mejor opción, llegó a jugarse el cuello, en sus penetraciones era acosado y derribado sin piedad, durante los minutos intensos del equipo visitante. Marcó un gol.

Tari bailó con la más fea. Salió de principio en la posición de pivote. Se expuso en demasía sin renunciar ni al contacto ni al choque, con lo que fue desgastando al contrario progresivamente, allanando el trabajo que posteriormente remataría Safa. En defensa sigue siendo el muro definitivo, lo que le llevó una vez más a detener un balón en trayectoria de gol con su propia cara, ese es el ejemplo, ese es el espíritu, y según sus propias palabras dirigidas a Carlos del OAR, "ese es el que no salta!". Casi marca en un par de ocasiones, pero según confesó, "guardo los goles para cuando verdaderamente hagan falta".

Román siempre recibe un par de toques en cada parte, y no siempre es cuando atacamos. Marcó tres goles y repartió juego, el protagonismo de hoy lo cedió a los extremos. En circulación a doble pivote marcó un gol antológico en la ya conocida jugada, bautizada con el nombre de "Ukranianian-connection".

Raimon marcó en la primera acción nada más entrar en la pista sustituyendo a Montse. Su anotación ofensiva se frenó ahí, se fue a afeitarse a la ducha habiendo marcado un gol, pero siempre tenemos que destacar su beligerancia defensiva y su entrega. De postre se pidió una tarta al wiskhy.

Eugeni marcó tres goles, aunque le costó ver portería, hizo lo que tenía que hacer. Se embarulló en las acciones colectivas y la empanada le duró hasta la cena, vamos que se perdió camino del restaurant, afortunadamente, y gracias a las nuevas tecnologías, encontró la senda del gol y Ca l'Agustí.

Alex marcó dos goles jugando desde el extremo. Vio como, incomprensiblemente, le sancionaban acciones irregulares cuando él poseía el balón, así que de manera inexplicable retrocedía para empezar acciones defensivas cuestionando la labor arbitral, al parecer todavía no ha entrado mentalmente en la categoría Máster.

Enric quiso darle emoción al partido, y el espectáculo no siempre acaba en gol, de hecho las jugadas más recordadas fueron las que él mismo protagonizó en varios mana a mano contra el portero. Si analizamos lo que hizo, observaremos que la trazada, las formas, el estilo y la clase le otorgaban un sobresaliente, pero la ejecución final, el lanzamiento o el objetivo no eran los deseables, no obstante podríamos decir que con el portero visitante, empezó el principio de una gran amistad.

Juanito salió en las acciones ofensivas de la segunda mitad, contribuyó de manera inequívoca a la consecución de la victoria, el parcial de éste período fue de 16-7. Montse fue el principal valedor y beneficiado del juego generado por el bravo central que mostró sus dotes de mando cual "mariscal de campo" o pastor de ovejas y cabras, por cierto, voy a terminar rápido que tengo que sacarlas.

Luis mi jugó al principio sólo en acciones defensivas, realizando un muy buen trabajo, de hecho sigue siendo muy necesario en el centro de la defensa. Jugar unos minutos en ataque fue el regalo de navidad soñado, verse en acciones ofensivas refuerza la moral de nuestro mejor "Gunner" (cañonero o tirador).

Alfons se presentó con un "bunyol" en la tibia, no le impediría jugar, pero es muy posible que afectase a la coordinación. Defendió como siempre, eso significa que su estancia-relax en la Rioja no le ha afectado en aspecto deportivo, aunque desconocemos si habrá traído alguna joya en forma de botella de elixir prohibido. Se hace notar cuando lo tenemos de cuerpo, alma y mente presente.

Francesc ve portería, se acerca a la portería, y cuando lo hace con balón ..... recibe una de palos que no se había imaginado, afortunadamente su juventud le hace levantarse como si nada. Marcó un gol, pero dejemos que la bestia respire, ya saldrá cuando verdaderamente nos haga falta.

Manolo, Alberto y Álex no jugaron por decisión divina, coincidencia o no con cenas de empresa hizo que no pudieran venir, y menos mal, no había sitio ni en el banquillo ni en el vestuario.

Lluis fue el guardameta de la primera mitad. Encajó 8 goles y realizó 9 paradas, fue de menos a más, parece la tónica habitual, necesita un cabreo monumental con la defensa o con un contrario para ponerse las pilas y ponerse en modo "para-bolas". Despide el año con una gran actuación.

Toni, al contrario de que Lluís, fue de más a menos. Empezó parándolo casi todo, sólo le metían gol desde 7 metros, pero un descenso en la intensidad defensiva le condenó a encajar 7 goles, habiendo realizado 10 buenas intervenciones. O quizás había algo en la grada que le distrajo .........

Bueno señores, esta ha sido la última crónica del año, espero seguir con ellas la próxima temporada, ya veremos. De momento quiero utilizar este medio para desearos paz, tranquilidad y amor, esperando veros en forma (a todos y todas) a la vuelta de las fiestas. Feliz 2017, mucho balonmano a todos y todas. Por eso os envío un brindis con el mejor de mis abrazos, y al abrigo de mis bíceps, espero ver también a los amigos de los equipos que año tras año continúan jugando a balonmano.

P.D. he dicho sólo a "los amigos de los equipos.....", los no amigos que nos e incluyan.

Importante victoria en la visita que hicimos contra un digno rival

Me va a resultar difícil empezar la crónica de un brillante partido, en el que sudamos mucho para poder ganar. Intentaré situar la acción en el contexto correcto para no caer en el error de no conseguir explicarlo verazmente, con sus detalles bien perfilados con el objetivo de ser fiel a unos hechos, alineados fatalmente en una secuencia temporal edulcorada por unos días, para muchos, vacacionales.
Al entrenamiento del viernes le faltó algo, al principio no sabía el qué, a parte de un montón de jugadores ausentes, claro que con el permiso del club, miembros del primer equipo claro, no obstante, los que asistieron, sudaron la camiseta esforzándose con profesionalidad teniendo en cuenta que se trataba de un macro-puente, en el que muchos tratan de evadirse por unos días antes de la entrada del crudo invierno, teniendo en cuenta que la climatología se presentaba muy favorable.
Como siempre el grupo de veteranos era bastante nutrido, Jordi Codina hizo acto de presencia, intentando sonsacar una receta sencilla, barata, y que le catapulte al olimpo de la gastronomía familiar, intentando quedar bien entre sus familiares en un encuentro gastronómico navideño, su presencia es siempre bien recibida, han sido muchos años disfrutando de su presencia, el resto éramos los de siempre, pero había un hueco difícil de llenar, pero no sabía ubicarlo, era la figura del presi, que desde Almería nos enviaba sus localizaciones a través del Facebook, no obstante, su presencia se notó durante el partido, al parecer utilizó las nuevas tecnologías para disfrutarlo en directo, los amigos del Sant Martí-Adrianenc han empezado a retransmitir los partidos en directo a través de internet, de manera que mi narración podrá ser contrastada ya que adjuntaré el enlace para ver el partido.
Empecé a esquiar en 1973. Mi hermano pequeño, Jordi, tenía 2 meses cuando un grupo de matrimonios, con todos sus hijos decidieron empezar a ir a esquiar a Baqueira Beret. Prácticamente ocupábamos el hotel entero. Durante más de 25 años fuimos a pasar las Navidades y la entrada de año, casi siempre, al bonito pueblo (casi fronterizo) de Les. Casi todos los matrimonios se dedicaban al comercio, en concreto a la venta de electrodomésticos, a uno de esos hombres le llamaban Gigi, y de vez en cuando le cantaban un cariñoso "Gi-gi Glamoros". Al término del partido debería ir al Tanatorio de Sancho de Ávila para rendirle el último adiós a un buen amigo de mi padre, y re-encontrarme con Pilar, Jordi, Sergi, Esteban y su esposa Nuri, a la que quise abrigar cariñosamente en una despedida muy emotiva. Éste no fue el último adiós, el padre de un amigo y ex-jugador de los veteranos falleció también este pasado fin de semana. Ambos se han ido con buen tiempo, con un radiante sol, casi primaveral, a las puertas de entrar en lo que parece va a ser un frío invierno (al menos eso esperamos cada año). La tristeza la tenía dentro, no era consciente de esos acontecimientos que para nada ensombrecen la gesta realizada, que empezaba muy temprano para todos, en mi caso alimentar a Victoria, Lavamat y Favorit, pasear al Floc, recoger los huevos y poner trigo y maíz partido a las gallinas, acciones que no me impedirían llegar puntual a la cita. Algunos habían quedado en Mollet, en una cómoda zona de aparcamiento con opción a tomar un café, sólo a los más previsores, otros, como en mi caso, iríamos directamente. La sorpresa agradable fue la presencia de Águeda con Nacho, fieles seguidores del equipo. Afortunadamente, las instalaciones tenían una buena calefacción y asientos cómodos. Además estaban los técnicos de grabación que habían dispuesto sendas cámara enfocando a cada una de las porterías.

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A las 10.00 en punto de la mañana teníamos que empezar el partido en las instalaciones deportivas situadas en la calle Binéfar, cerca de la fábrica de Coca-cola, aunque desconozco si dicha planta embotelladora sigue ubicada en la zona de la calle Guipúzcoa, o se ha deslocalizado buscando costes más baratos para las grandes multinacionales, esas empresas dirigidas por Yuppies, esos jóvenes urbanos profesionales, en realidad más pendientes de mantener su Statu quo, escalando posiciones dentro de su empresa o grupo empresarial, para ir prosperando progresivamente, disfrutando sólo engordando la cuentas de resultados con el objetivo de mantener excitados a los grandes inversores, sin embargo, éste grupo de dirigentes, formado por hombres y mujeres, amantes de lo materialista, de la estética, del qué dirán, del mira mi coche, que les encanta lo del "nos vemos el lunes, me voy de finde a París", han ido olvidando a la familia, a los amigos de siempre, a los de la infancia, han ido perdiendo de la esencia, incluso de la vida, para volcarse en lo vacío del similar que tiene las mismas aspiraciones, pues bien, jugar a Balonmano a nuestra edad nos aleja de esta telaraña embriagadora y seductora a la vez. Las diez era la hora perfecta, me permitiría echar las carreras, disfrutar con el juego, batirnos en duelo contra una de las bestias negras que nos robó la miel del triunfo en pasadas temporadas y llegar a tiempo al tanatorio.
Sant Martí es un equipo rocoso, compacto, con viejos conocidos, un grupo muy cohesionado tocado por la gracia divina, ya sabéis eso de las compensaciones celestiales, se prodría decir que "son feos pero simpáticos" (siempre cariñosamente, y no continúo para no descubrir al topo que tenemos dentro).
El partido empezó con eficacia goleadora del equipo local. El joven extremo se decidió a lanzar encontrando brecha con la que perforó nuestra portería, mientras que a nosotros (Sant Fost) nos costaba mucho marcar, no la metíamos ni de penalti, pero Alberto, no tardó en calentar para convertirse en ese muro impenetrable, impidiendo que los locales se fueran en el marcador, pero nuestra falta de gol era evidente, el marcador mostraba un "tremendo" empate a 4 pasado el minuto 20.
El míster, Jordi Nogueras, había preparado unas acciones ofensivas durante el entrenamiento del viernes, no sólo para ampliar nuestro catálogo de jugadas, sino para conseguir variantes en nuestras acciones más preparadas. Con el cambio de central se hizo un 3 de tres y pasamos a liderar en el marcador, pero posteriores errores (o aciertos del portero local) nos condenaron a llegar al descanso en tablas. Un inquietante empate a 7 lucía cuando nos retiramos al vestuario a reflexionar y escuchar al míster que nos quería relajar, nos quería transmitir confianza haciéndonos ver que el partido lo ganaríamos sí o sí, pero que era importante estar metido en el juego, respetar las decisiones arbitrales, acatarlas y aceptarlo todo con deportividad. Todos sabemos que la categoría Máster se hace difícil de arbitrar, todos los jugadores saben tretas para engañar al único árbitro, que no puede verlo todo, pese a todas las trampas que le planteamos, normalmente, los colegiados consiguen salir airosos, normalmente con buena nota, motivo por el cual, nuestro estimado técnico nos premió con una de sus charlas autoinculpándose de los errores, pero que nosotros somos tan buenos que lo enderezaremos todo (mira esos con la risita de "enderezar-enderezar"........) para salir victoriosos.
Para la segunda mitad, con Lluis en la portería, y con las ausencias de titulares en la defensa, Jordi Nogueras planteó "el equipo ganador", en función del resultado propondría un siete con garantías, estos 30 minutos ya eran para ganar, por lo tanto hizo menos rotaciones en los cambios, decisiones técnicas y tácticas, lo que le obligaría a actuar en función del luminoso.
Román era el jugador más certero cara a gol, mientras que al igual que Alberto, Lluís empezó frío, como la defensa, y pasamos de empezar a liderar el marcador al término de los primeros 30 minutos, a ir a remolque en el inicio de la segunda mitad. Pérdidas de balón, malas selecciones de lanzamiento, aciertos del portero contrario, y un ligero descenso en las acciones defensivas desencadenó en una reacción colectiva tras unos pequeños errores arbitrales, que si aparentemente nos perjudicaban, moralmente nos provocó una reacción de superación. Lluís se encontró con la senda del balón, aunque para el despertar de la bestia, los locales localizaron algunos lanzamientos muy cercanos al rostro, de manera que nuestro portero se convirtió en esa máquina de parar, un verdadero Mazinger Z, ahora ya tocaba el balón y éste no entraba, sacábamos rápido el balón y empezamos a contratacar. Teniendo a dos pivotes en forma, la variante ofensiva de mantenerlos en pista funcionó, para empezar a liderar en el marcador, a falta de diez minutos para la finalización del encuentro. Los segundos trenta minutos se mostraron con más efectividad goleadora por ambos bandos. El marcador se decantó del lado visitante, no sólo por el juego, la profundidad de banquillo no mostró fisuras. El papel que por un lado mostraba un anuncio de una casa en venta en C/Sant Cristòfol por 295.000,00 €, ocultaba en la parte de atrás los aciertos del equipo muy bien administrado por nuestro míster.

Jordi Nogueras, es uno de los entrenadores más astutos de la categoría, sus dotes de observador le convierten en un martillo percutor machacón de los errores o fisuras del equipo contrario. Uno a uno nos muestra algunas de las opciones que podemos utilizar, dejando siempre una ventana abierta a la improvisación, no hay nada mejor que el jazz o una mulata de fuego. Supo reaccionar, y con tacto orquestó el vestuario para liderar la victoria. 18-20 fue el marcador final.

Iván amrcó tres goles legales y unos cuantos que no subieron por falta previa, según criterio arbitral, que otros colegiados podrían haber validado, supo conectar con Safa y sobretodo con Román.

Álex volvió a jugar de extremo, como en tiempo pretérito, haciendo una más que correcta actuación, le costó encontrar el camino del gol, pero cuando lo vió no se cortó, consiguiendo tres tantos.

Francesc fue el de siempre, sin secuelas del granito que le dejó K.O. durante unas semanas. Marcó un gol y se llevó unos cuantos palos, algunos hasta en forma de falta en ataque, según apreciación arbitral .......

Safa marcó dos goles y pudo haber marcado unos cuantos más, los guardametas locales le pillaron el truco o no hizo un buen trato, pero como siempre ayudó para que el ataque fuera más efectivo, sobretodo en los bloqueos para los lanzamientos de Román, mientras que en defensa se mostró como un duro hueso, vamos como siempre, por cierto, me encontre con Jaume Puig y le envía recuerdos, siempre lo pone en sus charlas prepartido como ejemplo de jugador total, y pese a su edad, vamos que todavía está en la flor de la vida (y no es un local donde sirvan gintónics).

Tari se conformó con defender bien, y atacar unos minutos fue un premio a su trabajo. Defensivamente es uno de los pilares, el otro estaba en unas bodegas enviando fotos, refleja como nadie el prototipo perfecto de hombre del club, y canta como nadie el grito de guerra, el ya consabido "Veteranos.........".

Roman con sus 7 goles se fue contento a casa. Bueno, contento contento, también se fue calentito, su nobleza ofensiva le lleva a contactar con manos despistadas que le acarician la cara o rodillas sospechosas que le masajean el estómago, lo que le lleva a besar el parquet en repetidas ocasiones durante el partido, no sabemos lo que le pregunta el mister cuando entra en la pista para interesarse por su estado, pero el gesto afirmativo con la cabeza seguramente quiere decir SI.

Montse jugó poco, pero se mostró sin fisuras, no cometió errores, defendiendo bien, quizás no le llegaron suficientes balones en ataque para poder mostrar sus habilidades.

Juanito perdió el Status de Bonus, pardillamente cayó en la trampa del veterano portero, quizás por la definición que nos brindó Ramón bajo la ducha, aquello de que Dios le compensó, y con la parada del penalti se confirmó mi sospecha. Los ataques que dirigió terminaron en gol o en lanzamiento claro, fueron 10 minutos de balonmano total.

Enric maró 4 goles y no notó las dolencias que le han tenido preocupado durnate las últimas semanas. En realildad el viaje a Laponia no era para que el nen viera de dónde sale Papá Noel, ni descubrir cómo son la saunas finlandesas. Un brevaje envodkado, con esencia de raíz de pino, hielo ártico y unas hierbas milagrosas, hace maravillas.

Manolo es el hombre equipo por escelencia. Cuando está en defensa manda, hace mejores a sus compañeros, es astuto y sabe anticiparse al contrario. No marcó pero ayudó tanto en defensa como en ataque.

Luismi fue el único que trajo animación a la grada. Donde por un momento éramos mayoría, Águeda y Nacho veían la fuerza del Bravísimo Luismi en defensa, aspecto en el que no ha perdido nada. Ofensivamente sólo faltó que el compañero lo viera, o si lo vió, que se la pasara en el contragolpe de manual que subió en la segunda mitad, de haber marcado hubiese sido el niño más feliz del grupo.

Alerto paró 8, tres de ellas de penalti. Empezó flojo, encajando 4 goels rápidamente, pero cuando encontró la senda de la parada se mostró intratable. Encajó 7 goles.

Lluís hizo 9 paradas y pudo haber hecho 11 de no haber retirado la cara, pero a lo mejor paró 9 gracias a los lanzamientos a la cara, le metieron 13, la gran mayoría al principio de la segunda mitad.

mientras tanto.......
Raimon estaba de guardia, Micky no paraba de enviar cosas desde Almería que si el Cabo de Gata que si la playa....., Toni con una carrera importante y el taxímetro en marcha, Eugeni off (desconectado o de vacaciones), Dani terminando de enviar Whatsapps al grupo, Jordi Codina pensando en la comida familiar, Alfons inspeccionaba bodegas, Álex continúa con su recuperación, y Joan Barri haciendo un Vermut en Portofino.

Al final me dió tiempo a tomar algo con los amigos tras el partido y hacer algo parecido a un rally dentro de lo que se va a llamar la Gran illa o Super illa, para llegar a tiempo a Sancho de Ávila, para darle el último adiós al Gi-Gi. Ceremonia que empezó con mediterráneo de Serrat y terminó con una canción inolvidable.