Sant Fost Vs CAT-45

 

El señor colegiado, perfectamente vestido, indumentaria habitual, camiseta roja y calzón negro, pito en boca, estaba dispuesto a juzgar de manera imparcial el primero de los tres partidos con el que nos llenaríamos de emoción, puestos a elegir, me quedo con el balonmano, ¿y tú?

Me quedo contigo, le dije a Dani, en la cabina de comentaristas y control técnico. Empezamos con la presentación, primero con la del equipo visitante, durante la lectura de nombres, todo parecía normal hasta llegar al pivote conflictivo, Jopan Bonanova, o Borpanova (parecía la terminación femenina de un apellido ruso), se necesitó la ayuda de un intérprete, un grafólogo forense y un experto fonetista para que se identificara la persona en cuestión, "Joan Bordanova". Seguramente este lapsus elevó el espíritu combativo del CAT-45, dirigido por a la perfección por Jordi Martorell, que ya desde el primer momento mostró sus dotes de mando, llegando a cuestionar al colegiado cualquier acción (tomada o no), "¿Por qué empezamos el calentamiento ahora y no antes?, ¿y por qué no dentro de 5 segundos?, a ver, ¿por qué?, ¿por qué pitas?, "no tienes ni idea, qué no ves que es una encerrona para que nos cansemos"...... con esto sólo quiero manifestar que las protestas empezaron ya durante el calentamiento........, mientras que para el equipo local, Sant Fost, presentando el mayor número de jugadores posibles, no, rectifico, ya que el número aumentó para el último partido dado que Montse y Toni llegaron tarde......... .
Durante el calentamiento el equipo local manifestó  falta de forma, apenas llegó a pillar el ritmo, mientras Dani hacía las delicias del público encadenando los éxitos veraniegos.
El torneo para veteranos, Angel Costa, estaba a punto de empezar, y vaya un inicio de partido....., el equipo visitante casi rozó la perfección, mientras la casilla del equipo local mantuvo el cero inicial durante más de siete minutos, la casilla anotadora del equipo visitante no paraba de aumentar, hasta marcar un increíble (y merecido) 0-7. El chispazo de Salvador Gomis, sumado a la eficacia de Josep Jendra, bien acompañados por Victor Martin, con el combativo Joan en el pivote o los extremos, por un lado el venido desde Manresa y por otro al polivalente Ramón Rodríguez que mostró sus aptitudes atléticas corriendo de un lado a otro con ligereza extrema. Las penetraciones de Gomis fueron una pesadilla para la defensa local, si sumamos la eficacia anotadora de Pep, o los latigazos de Víctor, teníamos un cóctel difícil de digerir, además, el cambio defensivo de Diego por Pep oxigenaba las acciones defensivas refrescando el ataque por el descanso del incisivo lateral, pero cuando Diego subía el contraataque o decía quedarse en operaciones ofensivas, éste finalizaba la acción de manera decisiva, casi siempre con resultados positivos para su equipo.
El parcial dolió al equipo local, ninguna eficacia ofensiva debido en parte a aciertos defensivos o acciones de los guardametas que mostraron movimientos felinos propios de los mejores guardametas, increíblemente, cuando milagrosamente la defensa fallaba y el portero no llegaba, los lanzadores locales o bien derribaban estaciones espaciales, satélites meteorológicos, o incurrían en faltas de ataque por pisar la línea en el momento del lanzamiento, sin embargo, otro factor decisivo fue la anticipación defensiva de Salvador, brindando pases de lujo a los extremos para que éstos humillasen al equipo local que no se podía creer lo que marcaba el luminoso. Afortunadamente para los más optimistas, todavía quedaba tiempo, eso sí, los gerentes de las casas de apuestas empezaron a ponerse nerviosos, los pronósticos daban al S.F. como claro vencedor, y con aquel parcial los incondicionales del CAT-45 estaban a punto de crear una fortuna.
Sin embargo empezaron las rotaciones en el equipo local, que espoloneados por Manolo (ojo, no confundir con "Manolo" esta noche la cena te la haces tu) empezaron una remontada que parecía imposible, llegando al descanso con un 7-12.

 

 

La probabilidad de perder contra el CAT-45 era pequeña, pero el paso del tiempo daba crédito a lo que estábamos viendo. Para los espectadores, el resultado del marcador reflejaba lo que acontecía en el terreno de juego, pero la intensidad jugaba en contra de los visitantes, el cansancio de sus jugadores franquicia les relajó en el marcador, momento vital para los locales que dispusieron de infinidad de contragolpes para reducir el marcador, pero unas veces la recepción, en otras el guardameta o la falta de puntería dejaron estériles infinidad de opciones, además cuando las sombras de flaqueza aparecieron, el entrenador visitante sacó su repertorio verbal para despistar al colegiado sembrando dudas razonables, llegando a comentar el porqué de la existencia o "el de dónde somos y a dónde vamos", combinados con "¿no es falta en ataque?", "no tienes ni idea", "en la vida has pitado tan mal"......., de manera que tras un tiempo solicitado para refrescar a sus jugadores, sumados a unos tranquilizadores goles, hizo que la victoria no peligrase, mientras que el equipo local jugó de manera intermitente, en defensa demasiados errores dejando en desventaja a los guardametas, mientras que en ataque demasiados errores, y sobretodo falta de entreno, afortunadamente no estaba todo perdido, quedaban dos partidos, y quedaban opciones de ganar por golaveraje, si los veteranos Puerto-Sagunto eran capaces de ganar el superestimulado CAT-45.

El resultado final fue 18-22. Todo y la mejora mostrada por los locales, no fue suficiente para doblegar al contrario. Merecedor de la victoria, quizás realizando su mejor partido, o como mínimo el mejor inicio de su historia.